Si algo hay que reconocerle a Carmen Aristegui, es que ha logrado tener seguidores muuuuy pasionales, y detractores igualmente muuuuy pasionales (no sabemos cual gana). Entre otras cosas, esto es lo que ha logrado que su salida de MVS esté por muy por encima del radar. Tan por encima del radar está este suceso, que después de dos meses de no usar esta flamante sección no es derecho pero es interesante, los Abogados Sin Corbata, la vuelven a tomar.
El motivo de la presente, no es abundar en torno a si ha sido justificada o no, su salida de MVS. Ya se ha escrito mucho de eso. Asimismo, los Abogados Sin Corbata ya hemos aprendido que ese tópico es uno de los que no se toca. Aquel catálogo de: no discutir acerca de política, religión y futbol, ya ha sido ampliado por los Abogados Sin Corbata a tampoco hablar acerca de la Ley SOPA (stop online piracy act), y Carmen Aristegui…
El propósito de retomar este espacio, es destacar las oportunidades que da a la Nación del Internet, que Aristegui haya salido de MVS.
Para poder transmitir radio y televisión, se necesita una concesión por parte del Estado. Esto evidentemente provoca, que haya una simbiosis (o relación amor – odio) entre el Gobierno, y las concesionarias. Donde el primero busca no ahorcar tanto a las segundas para que lo traten bien frente a la opinión pública, y las segundas buscan no ahorcar tanto al primero para que las traten bien con las concesiones (ejemplos en este País, hay bastos). En el ideal, esta relación entre factores reales de poder, generaría un equilibrio; peeeero muchas veces la balanza está más inclinada para un lado que otro…
Afortunadamente, actualmente vivimos en una era donde para transmitir expresiones de manera masiva, ya no dependemos de una concesión del Estado. Está el internet. Esto que Eric Schmidt (quien fue director ejecutivo de Google) ha definido como: “la primera cosa que construye la humanidad sin comprenderla, el mayor experimento en anarquía”.
Para los Abogados Sin Corbata, la (ya muy comprobada) magia del internet radica en que una persona puede difundir audio, video, y textos de manera masiva, sin licitaciones, permisos, autorizaciones, o cualquier requisito burocrático que se le ocurra al gobierno (al menos hasta el día de hoy…).
Ojalá que Carmen Aristegui, canalice ese punch social que tiene en este momento, para darle mayor fuerza a esa fuente de información sobre la cual el Estado no tiene control e influencia: el internet.
Evidentemente, al día de hoy no tiene la misma audiencia el internet, que la radio y la televisión. Pero es un hecho la migración que está habiendo a favor del primero (claros ejemplos: Netflix, Spotify…). Y si contenidos con tanta fuerza como el de Aristegui, canalizan sus baterías a este medio de comunicación sobre el cual el Estado (afortunadamente todavía) no tiene control o censura, se debilitará la influencia de este sobre la información.
Un gran ventaja para Aristegui si transmite su noticiero sólo vía Internet, es que no estará obligada a los odiosos e impositivos 48 minutos diarios de publicidad política que obliga el Artículo 41 Constitucional…. (¿no es evidente el Control del Estado sobre estos medios?)
El sitio de noticias de Aristegui (aristeguinoticias.com), está muy bien calificado a nivel nacional, en lo que hace a audiencia. Ojalá que Aristegui no concentre toda su fuerza en pelear su permanencia dentro de un medio de comunicación que SIEMPRE será controlado por el Estado (en adición a que como negocio, está destinado a achicarse por la fuerza de los contenidos online); y mejor le apueste a seguir generando contenidos de interés, para que sean difundidos y capte (todavía más) audiencia en este espacio sobre la cual el Estado Mexicano no decide quien si tiene concesión, y quien no (o quien si habla, y quien no): el Internet.
