El viernes pasado la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) publicó un código de ética para los proveedores de comercio electrónico, y los lineamientos para la obtención de un “distintivo digital”. Esto último se puede interpretar como una estrella michelín del comercio electrónico; o un sellito de “buena conducta” obtenido en la vida adulta.
La primera pregunta que viene a la mente: ¿Es obligatorio adoptar el código de ética o tramitar el distintivo digital? No, no son obligatorios. Como aprendí hace poco: no son un must to have, pero sí son un nice to have.
Fueron dos publicaciones distintas en el Diario Oficial de la Federación: una publicación fueron los lineamientos para obtener el “distintivo digital” (visible AQUÍ), y otra publicación fue el código de ética (visible AQUÍ). Como puede resultar evidente, uno de los requisitos para poder obtener el distintivo digital es adoptar el código de ética de la PROFECO, o algún otro código que tenga los elementos esenciales del de la PROFECO.
¿A quiénes va dirigido? A las personas físicas y morales, nacionales y extranjeras, que distribuyen, venden, arriendan o conceden el uso o disfrute de bienes, productos o servicios, a través del uso de medios electrónicos digitales en territorio nacional. Es decir, podrá obtener este distintivo desde Amazon, hasta el vecino que vende galletas a través de su cuenta de Instagram, o quien vende consultoría por internet.
El código de ética excluye de manera textual a los proveedores de servicios financieros. Por lo que en consecuencia, estos tampoco podrán ser candidatos al distintivo digital.
La publicación anuncia que la PROFECO publicará una convocatoria cada 6 meses para la obtención del distintivo, la cual estará abierta por 15 días naturales. Las publicaciones aquí referidas no abren ese plazo de quince días. Por lo que muy seguramente próximamente se lanzará dicha convocatoria, y se recomienda irse preparando.
A lo mejor esa es la razón por la cual no se anunció cuánto iba a costar la obtención del distintivo digital (solo adelanta se deberá pagar “la tarifa autorizada”), o la razón por la cual no siempre abre la página anunciada para la obtención del distintivo: https://distintivodigital.profeco.gob.mx
Si no se puede abrir esa página, no es culpa del autor. Así viene:
Pero si llegó a fallar la página para registrarse en la vacunación, sería un acto de soberbia digital pensar que esta página no puede fallar.
Los requisitos para obtener el distintivo digital no son nada del otro mundo. Se pudieran destacar: que el negocio tenga al menos un año de antigüedad, tener historial de buena conducta con la PROFECO, contar con un contrato de adhesión voluntario ante la PROFECO (esto sí puede ser una latita), tener inscripción ante el Sistema de Información Empresarial Mexicano (es mediante cámaras, AQUÍ se abunda al respecto), y evidentemente haberse adherido al código de ética de la PROFECO (o alguno que tenga sus elementos esenciales).
Sí, pide un año de antigüedad, así que no cualquier NENI lo puede tramitar. Este término lo aprendí la semana pasada: Nuevo(a) Emprendedor(a) de Negocio por Internet.
El código de ética tampoco es nada del otro mundo. Entre lo que se destaca de este es: contemplar mecanismos de devolución; mecanismos de solución para reclamaciones o aclaraciones; términos y condiciones visibles y de fácil acceso (y que desde luego cumplan con la Norma Mexicana visible AQUÍ); así como avisar el tratamiento que se dará a los datos personales.
Hay un apartado dedicado a la publicidad digital. El cual señala la necesidad de que no sea engañosa o abusiva, se identifique como tal (es decir, los influencers deberán evidenciar que están haciendo un comercial), y el consumidor deberá poder elegir si desea dejar de recibir publicidad digital directa (no SPAM).
Lo más destacable que considero del código de ética es lo relativo a la solución de conflictos. La necesidad de que el proveedor cuente con mecanismos propios para solucionar conflictos. Si la gente confía en Amazon, no es porque sabe que “Amazon cumplirá la sentencia que llegue a dictar un Juez”. Sino por su mecanismo interno para solucionar reclamos del consumidor.
Con todo y que odio al Estado (sí, lo odio), de verdad espero que lo antes desarrollado funcione. Esto es: (i) que la autoridad use criterios razonables para otorgar el distintivo o revocarlo, (ii) los proveedores busquen obtenerlo, y (iii) los consumidores busquen proveedores que lo tengan.
Todo mecanismo que nos ayude a tenernos confianza, es una buena noticia para la sociedad.
¿Qué dijiste campeón? Sí, parece estoy dando el viejazo.
